
«Einstein decía que no sabía como iba a ser la tercera guerra mundial, pero que la cuarta sería con palos y piedras»
Einstein decía que no sabía como iba a ser la tercera guerra mundial, pero que la cuarta sería con palos y piedras. Estaba equivocado. En la actualidad vivimos inmersos en esa tercera guerra mundial que él desconocía. Se trata de una guerra que sólo se puede detectar por pequeños conatos de violencia física. Los atentados terroristas de los radicales islámicos lo son.
Pero hay una guerra mucho peor… Habiendo perdido toda la razón desde sus propios postulados, tras la caída del muro de Berlín, los Comunistas tratan de dulcificar y vender, en píldoras rodeadas de caramelos de felicidad su doctrina a la juventud inocente y desinformada, muy poco educada o si lo está, es en el buenismo que les han vendido en los últimos treinta o cuarenta años. Esto es así porque gente de pensamiento laxo, una gran mayoría por encima del resto de docentes, se ha instalado precisamente en los puestos que sirven para educar (digo adoctrinar a los niños y jóvenes).
Las pruebas para ser profesor puede que estén muy bien en conocimientos, pero debieran ser exigibles también pruebas psicoanalíticas para descartar a la gente con problemas de estabilidad mental o que tenga prejuicios con los temas que se refieren a los asuntos relacionados con la libertad, o la historia, que no tienen porque tener que ver con una visión socialista de la sociedad.
Igualmente pasa en algunas facultades de las universidades Españolas, donde grupúsculos de PNN o sea Profesores No Numerarios, es decir no Catedráticos que se dejaron las pestañas aprendiendo para un examen de alta exigencia, se han instalado cómodamente, casi a dedete, como doctrinarios religiosos en sus púlpitos aularios. Esgrimen odio y espumarajos contra la sociedad, que en contra de lo que piensa les ha tratado demasiado bien para lo que se han ganado, y contra sus alumnos, que muchas veces por miedo a no poder acabar la carrera se doblegan a sus doctrinas y caprichos.
No sé si vais viendo que tipo de guerra es la que se está imponiendo como la cuarta guerra mundial, la desinformación, la incultura y la fabricación de una sociedad de ovejas teledirigidas por el gran hermano del que se hablaba en novelas conocidas. Y por supuesto es una sociedad en que la quinta guerra mundial está ya empezando, y en eso si tiene razón Einstein, como por ejemplo en Venezuela en donde gente, que quiere recuperar la libertad y el rumbo de sus vidas y su país, se enfrenta con palos y piedras a un enemigo armado hasta los dientes y que posee la mala baba del que se siente acorralado y totalmente despojado de la razón y de las certitudes. Porque esas no se pueden sobreponer a las realidades que se imponen desde lo más intimo de los seres humanos y que es su esencia, su propia genética humana.
Magnìfico artículo, Rodolfo. Desoladora verdad. Quizàs Einstein vio que la tercera sería una guerra nuclear, con lo que tras la devastación total, volveríamos a la prehistoria.