Anna Castells 
«Asistimos a la oportunidad perfecta para comprobar hasta que punto se ha degradado la calidad jurídica del Tribunal Constitucional»
Estaría bien que el gobierno llevase hasta el final su esperpento y presentase ante el TC un recurso contra el protocolo fantasma de la Junta de Castilla y León. Sería la oportunidad perfecta para comprobar hasta que punto se ha degradado la calidad jurídica de lo que en su momento fue un reducto de excelencia y rigor constitucional.
Valdría la pena ver cómo se retuercen los argumentos para justificar que una oferta de información vulnera derechos constitucionales o representa un impedimento para cumplir esa decisión.
Valdría la pena también observar cómo se retuercen los argumentos para justificar que el aborto forma parte de esos derechos fundamentales que el TC está obligado a preservar (por cierto, también en Cataluña…). La última vez que lo miré, la interrupción voluntaria del embarazo no formaba parte del elenco de derechos fundamentales que gozan de especial protección constitucional.
¿Se atreverán los nuevos magistrados impuestos por el gobierno a aplicar estrictamente criterios jurídico/constitucionales o se esforzarán sumisamente por hacerle el trabajo sucio a un gobierno echado al monte?
En todo caso Sánchez debe darle las gracias (una vez más) a VOX por haberle facilitado un pretexto, por más fútil que sea, para desviar la atención de su desastrosa gestión (¿Quién va a trabajar si le regalan 1400€ mensuales sin trabajar, como pretende su vice presidenta?), del agobio económico en que ha sumido a los españoles, de las mentiras constantes con las que pretende engañarnos y, sobre todo, de su intolerable soberbia y desprecio por las normas democráticas.
