Conversaciones en el andamio: La tierra sa’gripao. Por Francisco Gómez Valencia

Conversaciones en el andamio: La tierra sa’gripao.

En la puerta del taller de Manolo: entre la tienda de las básculas y el mercadillo, pues ahí…

– ¡Manolo, Manolo que se para el mundo!

– ¿Qué dices, ‘atontao’?

– ¡Que sí, que sí; que han dicho que se para el mundo!

– A ver Perico: respira hondo ‘questas’ tonto de gordo. Vamos que te lías…

– Pues mira resulta que “el núcleo de la Tierra se ha frenado y lo saben gracias al estudio de cientos de terremotos que muestran que la capa más interna del planeta ha perdido velocidad y girará en sentido contrario a la superficie, lo que puede acortar el día e influir en el nivel del mar”.

– ¿Pero tú has vuelto a las andadas o qué? Tira pa’llá, tira pa’llá, que ‘entavía’ te meto ¿Pues no que dice el ‘tontolaba’ que la tierra ‘sa gripao’? ¡’Amos’ no jodas!

– ¡Que sí Manolo que sí: créeme por Dios! “Que La variación de las ondas sísmicas a medida que atraviesan el planeta desvela la composición interna del núcleo y su velocidad de rotación”, y así lo saben…

– ¡Que tires te’dicho, ‘questoy mu liao’!

– Bueno , bueno yo te aviso, luego no me vengas con que si no te lo dije…

– Ahí que joderse, la puñetera droga cuanto daño ha hecho a esta generación. Míralo… él catedrático y yo aquí, lleno mugre… Cago en ‘tó’ lo que se menea! Que tires… y no me mires..!

– ¡Pues a ver estudiaoooo!

– ¡’Cagontuputx’ madre!

Feliz día de Santa Paula

Españistan a 26|01|23

Francisco G. Valencia

Licenciado en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid en 1994 por lo tanto, Politólogo de profesión. Colaboro como Analista Político en medios radiofónicos y como Articulista de Opinión Política en diversos medios de prensa digital. De ideología caótica aunque siempre inclinado a la diestra con tintes de católico cultural poco comprometido, siento especialmente como España se descompone ante mis ojos sin poder hacer nada y me rebelo ante mí mismo y me arranco a escribir y a hablar donde puedo y me dejan tratando de explicar de una forma fácil y pragmática porque suceden las cosas y como deberíamos cambiar, para frenar el desastre según lo aprendido históricamente gracias a la Ciencia Política... Aspirante a disidente profesional, incluso displicente y apático a veces ante la perfección demostrada por los demás. Ausente de empatía con la mala educación y la incultura mediática premeditada como forma de ejercer el poder, ante la cual práctico la pedagogía inductiva, en vez de el convencimiento deductivo para llegar al meollo del asunto, que es simple y llanamente hacer que no nos demos cuenta de nuestra absoluta idiotez, mientras que la aceptamos con resignación.

Artículos recomendados

Deja un comentario

A %d blogueros les gusta esto: