
«De nuevo el PP se engaña pensando que el PSOE le va a ser fiel para no depender de Vox, le va a ser leal y no, no lo será»
Estamos en una operación de cambio social que necesita partidos y líderes políticos que sean muy fuertes y muy contundentes haciendo frente a la izquierda cuando hablen de temas ideológicos. Si no lo son, como es el caso del PP, en el fondo lo que le ha ido, va e irá pasando, es que la táctica utilizada para acercarse a la izquierda, para supuestamente robar votos, que juzgada en sí misma puede parecer muy acertada, en el sentido de que puede producir réditos a corto plazo, irá comiéndose a la estrategia. Me explico con un lenguaje coloquial para que ustedes sencillamente me puedan llegar fácilmente a entender; la meta final es el cambio social, pero si tácticamente vas aceptando los postulados del otro, es decir, aceptando el cambio social que te plantea el otro, te estás comiendo tu propia estrategia y cuando llegas al final del camino de tus tácticas ya nada puedes hacer porque la sociedad te ha cambiado por debajo, estás liquidado.
El Partido Popular es víctima de sus tácticas y cada vez va a serlo más porque siguen pensando que la táctica de acercamiento a la izquierda, de identificación con ella y de sumisión con ella en determinadas materias les va a ayudar electoralmente y esto no es así. De nuevo el PP se engaña pensando que el PSOE le va a ser fiel para no depender de Vox, le va a ser leal y no, no lo será. La gente de la izquierda jamás reconocerá ni a Feijóo ni a ninguno de sus colaboradores como sus representantes, odia a la derecha. Podrán robar alguno de esos votos de ese centro ecléctico, pero la táctica nuevamente irá cargándose su estrategia y cuando ayudados de los 800.000 votos que le roben al PSOE lleguen al poder, nada podrán hacer para sacar adelante la estrategia que lleva por base el plan de cambio social que debería de tener el PP y debería de querer implantar y por el cual es el origen de muchos de sus votantes. No estamos frente a un partido político frente el cual por detrás tiene una ideología, es decir, una serie de principios y valores, sino que estamos frente a partidos políticos que lo que buscan son votos y dan lo que les pide la sociedad en el momento, por lo que no se plantean que como mínimo cuando gobiernan abrir el abanico para que lo que inicialmente tengan como idea también sea posible.
No quieren comprometerse con el cambio social y antropológico, si realmente lo deseasen comenzarían por derogar las leyes de género, lgtbi y trans que publicó, ejecutó y dictó el Partido Popular en Galicia y en Madrid, esas leyes deberían ser el motor para comenzar de 0. No se pueden derogar las leyes nacionales que ha aprobado el PSOE y PODEMOS manteniendo idénticamente las mismas en las CCAA de tinte azul. A no ser que se pretenda estafar a cierto votante conservador. Sin batalla cultural no habrá económica posible por dar. Ni una ley será derogada siguiendo una estrategia política en la cual el PSOE se ha extremado a la izquierda dejando sin cubrir electoralmente el centro, la socialdemocracia y el socialismo desencantado, queriendo ocupar ese espacio colindando así con ellos. De nuevo alternancia al más estilo “marianista” esperando a recibir la ruinosa herencia socialista, intentando amansar con propuestas de bajadas de impuestos a la fiera que pacta con el brazo político de la ETA. De risa, estafadores que, aprovechando el asentamiento territorial bipartidista a lo largo de los años, intentan venderse como alternativas siendo simples relevos.