
«Los promotores de la República aprovechan la ocasión para denostar el modelo de monarquía parlamentaria, vigente en muchos de los países mas desarrollados de Europa»
La Monarquía está estos días en cuestión con la excusa de una supuesta mala conducta fiscal del anterior Rey. Y los promotores de la República aprovechan la ocasión para denostar el modelo de monarquía parlamentaria, vigente en muchos de los países mas desarrollados de Europa, para ensalzar las virtudes del modelo republicano…
Me gustaría recordar algunos de los episodios mas recientes que demuestran la superioridad moral de las Repúblicas sobre las Monarquías:
República francesa; Mitterrand, izquierda, entre otras lindezas montó una célula para espiar a sus “enemigos”, principalmente periodistas, hizo hundir un barco de Greenpeace y… a sí, mantuvo a su amante a costa del Estado en una vivienda del Gobierno.
Por cierto, también formó gobierno con los comunistas a los que tuvo que echar porque le montaban manifestaciones…
Jacques Chirac, derecha, juzgado y condenado a dos años por corrupción.
Nicolas Sarkozi, derecha, juzgado por financiación ilegal.
Hollande, izquierda, bueno a este pobre mejor dejarlo de lado que bastante ridículo hizo con sus líos de faldas.
República de Italia; Bettino Craxi, izquierda, huido a Túnez para evitar la cárcel por corrupción.
Silvio Berlusconi, derecha, acusado de corrupción de menores. Sus escándalos económicos no caben en un simple comentario.
República Israelí, Mozhe Katzav, juzgado por acoso sexual.
Benjamin Netanyahu, aferrado al cargo para evitar ser juzgado por corrupción.
Y mi preferida; República de los Estados Unidos de Norteamérica. Empezamos con Nixon, “despedido” por espiar a sus rivales.
Bill Clinton, sexo en la Casa Blanca, y no con su santa esposa.
George Bush, llegó a la Presidencia con oscuras maniobras y llevó a su país, y a medio mundo, a una guerra con mentiras.
Estos son solamente unos pocos y recientes ejemplos que demuestran que ningún modelo político está libre de amparar corrupciones e incluso delitos.
Pero una cosa es cierta, quien no debe mentir, adular, eliminar ni pasar por encima de nadie para llegar arriba tiene menos posibilidades de ser una mala persona y muchas más para representar a los ciudadanos de un país, a todos los ciudadanos, no solo a los que le votan o a los que dependen de él…