
«Juan del Val es la exaltación del follonero, del cotilla superior, del indigno comunicador, que saca provecho, popularidad y dinero con sus aberrantes insultos a todo lo que le viene en gana»
Me pone de mal humor ese personaje que ha creado y permite en sus tertulias de El Hormiguero el gran Pablo Motos, llamado Juan del Val, que durante un tiempo trabajó como redactor taurino en TVE, (donde creo que conoció a su actual mujer). Al espacio televisivo le sobra talento y categoría para tener en sus tertulias a un criticón furibundo de todo lo que se le antoja. La verdad es que ha encontrado un nicho suculento, como es el criticar y aborrecer todo lo que se le meta en su cacumen. Me lo imagino en su casa meditando a quién critico esta semana.
Es la exaltación del follonero, del cotilla superior, del indigno comunicador, que saca provecho, popularidad y dinero con sus aberrantes insultos a todo lo que le viene en gana. Me dirán que está en su derecho de criticar, pero yo también de expresar que me parece el mayor insultador y perverso comunicador que hay hoy en España, a la par que ese otro promotor del odio y las malas costumbres como es Jorge Javier Vázquez. Tal para cual. Este tertuliano nauseabundo se despacha a gusto con personas y grupos con total desfachatez. Sin importarle la dignidad de esos colectivos y solo por afán lucrativo. Podría aquí decir que su libro es una porquería, pero no lo hago porque no lo he leído y, por supuesto, no leeré jamás.
Soltar insultos por la boquita, como único recurso, es muy pobre y de peor gusto, y es pan para hoy y caca para mañana.