Vicky Bautista Vidal 
«La inteligencia artificial dedicada al arte de la escritura es un inmenso plagio que no contempla la exclusividad de la creatividad individual»
Se congratula el mundo a causa de esa nueva forma de perder la poca inteligencia que queda. El entusiasmo, la creatividad, la imaginación y el trabajo…
Surgen infinidad de creadores por inteligencia artificial que, manejando la nueva herramienta, la más grande plagiadora de la humanidad, dicen escribir libros y los venden en Amazon como churros en cucurucho. Y se vanaglorian y se autodefinen como “autores”…
Puedo entenderles pero entiendo mejor la decepción y el enfado de los verdaderos escritores, artistas de la palabra, que ven invadido el campo sagrado de la Literatura por especies no autóctonas que, a partir del material sustraído por la susodicha inteligencia a cientos de millones de páginas en Internet, pueden recibir de ella montajes bien escritos y hasta con enjundia, basados en la mezcolanza que una máquina, ha resumido sobre el campo ya sembrado por miles, por lo que reitero la opinión ya dada de que la inteligencia artificial dedicada al arte de la escritura, por ejemplo, es un inmenso plagio donde no se contempla para nada la exclusividad de la creatividad individual.
Puedo comprender la fiebre que sí, cambiará el mundo, pero no para mejor, me parece a mí.
Pienso que, muchos de los que se dejaron el tiempo la vista y la esencia en crear algo, pueden verse desinflados como globos pinchados.
Siento el futuro como un inmenso reservorio de gente inactiva mentalmente, viviendo de las rentas de millones de conceptos pasados. A veces erróneos, puesto que la máquina no distingue entre verdad y mentira y arrampla con todo lo que le suena a lo mismo.
Si ya no andábamos contentos con la poca creatividad y la memez global del presente respecto a casi todo, imaginen cuando a una mayoría de cenutrios, una máquina, les saque las castañas del fuego dándoles un intelecto de pacotilla, para ir tirando.
¿Para qué estudiar?… ¡Abajo la curiosidad! … ¡Muerte al esfuerzo personal!… Desterremos la palabra “Mérito” …
Surgirán los nuevos genios cuyo valor consistirá en la habilidad de preguntar y exprimir el conocimiento de esa inteligencia maquinal para dar al mundo creaciones basadas en “cosas” sacadas de Internet de aquí hacia la Prehistoria.
Ya sé que de la inteligencia artificial también se pueden conseguir ayudas extraordinarias como listas de datos cuya recopilación podría acortar tiempos para quien trabaja en alguna materia y otras circunstancias culturales favorables para ganar tiempo, pero… medite quien quiera sobre la poca ayuda que supondrá esa inteligencia artificial para la inteligencia natural humana de las nuevas generaciones en un futuro cercano, en algunos casos escasa o no formada por mor de la nueva comodidad creativa…
Sé que la frase: “Éramos pocos y parió la abuela” es demasiado coloquial para un escrito formal, pero la formalidad se me ha ido a dar una vuelta y viene la frasecilla muy a cuento con el asunto. Ahí la dejo para que, en un futuro libro de alguien, la Inteligencia Artificial la instale en algún párrafo y sirva de pequeña venganza de esta que lo es -otra contribución- hacia todo lo que provoque la vagancia intelectual y el medre sin derecho de falsos artistas.
