
«Lo que es seguro es que, en cuanto salga hoy del Congreso, a don Narciso no deberá faltarle un buen asiento junto a Mephisto»
(1)
Tan extremas resultan las últimas ‘olas de calor’,
que uno hasta le teme algo menos al Infierno;
pues, si con él decide castigarnos el Ser Supremo,
nunca está de más poseer ya algún entreno
que nos haga, tan ardiente sufrimiento, algo menor.
(2)
Cuentan que apenas si se inmuta ante ello don Narciso:
lleva tal cantidad de incursiones por el ígneo Averno,
que no da en llevarse ya nada más que un simple abanico.
Lo que es seguro es que, en cuanto salga hoy del Congreso,
no deberá faltarle un buen asiento junto a Mephisto:
(3)
la máxima traición a la patria habrá llevado a efecto.
Y ni un solo español se habrá ante ello sorprendido:
siempre sabe estar al nivel de su pérfido y diabólico EGO.
Al cabo, es lo que millones de votantes han permitido.
¡Váyanse, luego, a quejarse… al puto cuerno!