¿Pero es que no hay nadie que diga ¡hasta aquí hemos llegado! y empiece a meter sinvergüenzas en la cárcel o es que ya todos somos sinvergüenzas?
¿No hay nadie que empiece a meter sinvergüenzas en la cárcel o es que ya todos somos sinvergüenzas? Por Rodolfo Arévalo
