Y encima un servidor tiene que aguantar un derroche de frases lapidarias e imaginativas sobre la libertad de expresión, la ética de los pueblos , el derecho a decidir y la madre que parió a la Universidad Complutense, que es mi Universidad y desde hace unos pocos años, el símbolo de la revolución comunista de los falsos y pagados profetas. Ahí está, para la historia la imagen de hoy protagonizada en el señor Vestrynge, uno de los detenidos en Madrid, por envidar sin cartas al estado de derecho.
Y es que hay seres falsos que juegan al engaño. Hay humanos egoístas que se atreven a proclamar sus débiles pensamientos en público y mas allá está el señor Vestrynge que falsea, la ética, la política y hasta la retórica, proclamando en público la lbertad de los monstruos.
Señoritos de izquierdas, niños bien de papá; este es de la generación antigua y no lleva coleta, pero las chorradas son las mismas.