A la intemperie de los manipuladores que difaman a su antojo impunes a la Ley de todos y el sentido común de cada uno. Los que llenan de mariposas los cerebros huecos de los adoctrinados. Así está España. Perdida entre proclamas, promesas y acusaciones falsas, admirado Fran Rivera. Usted lo ha dicho, y bien, joven maestro: «El respeto es la base de toda sociedad» y aquí, en esta España nuestra que no sabemos dónde va, el respeto está perdido por los intereses bastardos de los que no tienen hijos, dignidad y ni tan siquiera conocen la auténtica línea roja que divide el honor de la traición.
Porque en esencia lo que en realidad molesta a los miles que aúllan insultándole en las redes sociales es que usted es un torero y que tiene el arte de la tauromaquia grabado en su adéene. Los mismos que se afanan en publicar la manipulación de Antena 3 por haber emitido unas imágenes reales que demuestran la conexión venezolana con el apoyo a los terroristas de sus gurús, como la señora Bescansa que paseó a su bebé por las Cortes para comprar un par de votos.
Su infamia. Clara y manipuladora. En la otra cara de su gesto, de sus palabras, maestro: «Más segura que en mis brazos, mi hija, no va a estar nunca».
Ole !!!
Reblogueó esto en El Heraldo Montañés.