
“Los muecines de la información cumplen su bastarda función todos los días de sus minaretes catódicos”
Padecemos tiempos de niebla y de penumbra, mientras escuchamos a los muecines de la información desde sus minaretes con su estudiada y engañosa voz, tratando de engañarnos con estadísticas y con los felices días de vino y rosas que han de venir, ocultandonos la realidad que nos aplasta.
La pena y el sufrimiento son individuales e intransferibles pero los entusiasmos están construidos sobre la base de lo colectivo. Los imanes de la comunicación lo saben y cumplen su bastarda función.