
¿Por qué se permite que las naranjas egipcias importadas a la UE se denominen Valencia? Pues va a ser que una Unión Europea que no defiende al ciudadano europeo, ni el producto europeo, ni al consumidor europeo ni al agricultor o ganadero, o pescador europeo… ¿Igual es que no nos sirve, no?
Es para quedarse de piedra, ponerse a llorar y no echar ni gota, a nuestros gobernantes les sigue importando un colín la competencia desleal hacia nuestros agricultores, en este caso hacia nuestros cítricos. Me topo con una información de el boletín online especializado en agriculruta freshplaza que afirma cómo lo mas normal del mundo «Hay algunos mercados que todavía dependen mucho de las Valencia de Egipto. Se espera que la demanda de naranjas Valencia egipcias aumente en las próximas semanas, especialmente desde los mercados europeos. La guerra entre Ucrania y Rusia ha afectado significativamente a la temporada, ya que ambos países han importado grandes volúmenes de naranjas egipcias en las temporadas anteriores”-
Naturalmente es un engaño al consumidor, dada la calidad de la naranja española, la Denominación Valencia, garantiza que, el comprador ni se moleste en ver la trazabilidad del producto que está comprando, para perjuicio del productor español, que, año tras año ve con desesperación cómo tienen que dejar el fruto en el árbol porque les cuesta menos que recogerlos y venderlos a precios que no cubren los costes.

Pero es que hay más, según el mismo medio ..“Las importaciones de pequeños cítricos se elevaron entre septiembre y enero hasta las 203.943 toneladas, aumentando un 24,3% respecto a los mismos meses de la campaña previa. Marruecos fue el principal proveedor extracomunitario de pequeños cítricos al mercado de la UE con más de 74.000 toneladas, registrando un aumento interanual del 32,5% que, aunque significativo, fue menor que la mitad del incremento que experimentó Sudáfrica en el envío de estos cítricos: con 56.724 toneladas registró un incremento del 69,2%.En volumen enviado, Turquía se ubica en tercera posición con algo más de 40.000 toneladas, seguida de Israel con 9.620 toneladas, que retrocede sus envíos de pequeños cítricos un 35%.”
Para redondear el despropósito, según denuncia AVA-ASAJA a partir de datos oficiales, estas importaciones de cítricos están aportando plagas que en Europa ya estaban controladas, “Bruselas rechaza añadir medidas más contundentes a Sudáfrica pese a que en 2021 sus envíos citrícolas con destino a la UE alcanzaron la cifra más alta de interceptaciones de mancha negra en la última década: 43 detecciones en 2021 y un total de 200 desde 2012”. Sudáfrica encabeza el ranking de países con más interceptaciones de mancha negra, por delante de Argentina (189) y Uruguay (99), que en total suman 702 detecciones en los últimos diez años.

Ahora tras muchas presiones la UE, se abre a exigir el “tratamiento en frío” para impedir la proliferación de otra plaga, la polilla, ya que el tratamiento en frío «es la única solución para que, tanto Sudáfrica como la UE, puedan permanecer tranquilos en esta cuestión«. La garantía para Sudáfrica está en que le asegura que no se producirán interceptaciones de fruta con falsa polilla, lo que podría desembocar en el cierre del mercado. Y es que, junto a Zimbabue, ambos países acapararon todas las interceptaciones, excepto una, de esta plaga en las fronteras europeas en 2021.
Es decir, que, mientras que a los agricultores europeos se les masacra con exigencias fitosanitarias para poder comercializar sus productos, mientras que no se les exige a los grandes distribuidores es decir los hipermercados de todo el territorio español que se les abone un precio justo por su trabajo, al igual que al ganadero sea de carne o productor de leche y no que las ofertas de los grandes mastodontes las paguen los verdaderos productores de nuestro sector primario, ellos con sus agendas globalistas nos la meten doblada con compromisos sin controles, sin aranceles y sin exigencias, y, encima permitiendo que las denominaciones contribuyan al engaño descarado del supermercado al cliente.
Pues va a ser que una Unión Europea que no defienda al ciudadano europeo, ni al consumidor europeo ni al agricultor o ganadero, o pescador europeo… ¿Igual es que no nos sirve no?