
«La izquierda pega un golpe de Estado judicial y el PP lo condena en dos tweets y pretende recurrir la decisión en el tribunal corrompido»
Qué jóvenes eran ustedes cuando el PSOE llegó al gobierno allá por el año 2018 basándose en una supuesta frase de una sentencia para montar una moción de censura y librar España de la corrupción. Quién les diría que 4 años después terminarían reformando el delito de malversación para que robar quedase impune. Porque claro todos sabemos que no es igual de corrupto el que se lleva el dinero público a su bolsillo, que el que se lleva el dinero de todos los españoles para financiar a su partido, para que otros se vayan de putas y esnifen cocaína creando una red institucional que les asegurase su reelección durante 40 años o para poner urnas ilegales y vivir en Waterloo. Ironías a parte, recordarles que Margarita Robles fue magistrada del Tribunal Supremo y vocal del CGPJ. En estas manos está la justicia en España.
De Podemos qué cabe decir, siendo uno de sus principales objetivos el de llegar a la política para regenerarla terminando con la corrupción y acabar viajando a Argentina para apoyar a Cristina Kirchner condenada por malversar 1.000 millones de euros, ya que es obvio que cuando condenan a un político de derechas el corrupto es el político y cuando condenan a uno de izquierdas los corruptos son los jueces (nótese la ironía una vez más).
Recordarles que el pretexto de la reforma del delito de malversación como fruto de la negociación con ERC para el apoyo de los presupuestos, no deja de ser una cortina de humo y que el motivo real es el de rebajar las penas tanto a Chaves y Griñán sin tan siquiera tenerlos que indultar públicamente, dos pájaros de un tiro. Les molestaba la corrupción sí, la de otros.
Continuemos analizando detalladamente el golpe de estado a cámara lenta que se está produciendo en España, recuerden el orden de los cuatro pasos para consumarlo: asalto al TC (ante el pretexto del bloqueo por parte de la oposición), referéndum ilegal (travestido de consulta popular), ilegalización de Vox (en nombre de la paz social) y derribo a la corona. Para ello pongamos el foco en la abolición del delito de sedición, sin delitos contemplados el autogolpe está servido sin consecuencias penales. Para que se hagan una idea de la magnitud de la gravedad, el comunista Pedro Castillo ha sido detenido por intentar pegar un autogolpe de estado en su país y será juzgado por delito de sedición. Si en estos momentos Sánchez decide hacer lo mismo seguiría siendo Presidente del Gobierno sin haber cometido tal delito al haberse abolido del Código Penal.
Hasta ahora de las mayores atrocidades cometidas en España, sabiendo además que su eliminación obedece al intercambio de los votos de los independentistas expresando abiertamente “que lo volverían a hacer”. En un mes el gobierno ha abolido el delito de sedición y ha elegido para formar parte del TC al exministro de justicia (novio de Batet) que firmó los indultos y a una ex-alto cargo del Gobierno, siete años tardó Chávez en hacer lo que están haciendo con las instituciones en España. Con el asalto a la justicia tenemos corrompidos el TC, CGPJ, Fiscalía, RTVE, Correos, CIS, el CNI, Tribunal de Cuentas e INDRA y socialmente con un país repleto de golpistas en la calle indultados, terroristas acercados, homenajeados y en libertad, junto a secuestradoras y corruptos, conviviendo con inmigrantes ilegales y violadores, pederastas y agresores sexuales. Para que se sitúen, nos encontramos en la segunda fase de esas cuatro anteriores descritas y sepan las que la proseguirán.
Bien, la resonancia del diagnóstico con un poco de ganas creo que es sencilla de interpretar para la gran mayoría, la cuestión está en la receta a aplicar para la sanación, y es que queridos lectores, desgraciadamente con todo mi pesar les digo que el principal partido de la “oposición” que en él debería de ser en quien recayera la mayor actividad ni está, ni se les espera y desgraciadamente no existe. Ante esta izquierda golpista no cabe ni «moderación«, ni «centrismo«, ni «socialdemocracia» posible. No hay más, quien no lo entienda o no lo quiera entender empieza a convertirse en parte del problema y no de la solución. O votamos a Vox en masa o nos quedamos sin España.
No tendría que ser Vox quien presentara la moción de censura, sino el supuesto líder de la oposición. Aunque todos sabemos que Feijóo no es ni líder, ni oposición. Sigo, quien diga que la moción no es necesaria y que obedece a propaganda electoral es parte del embolado que aspira a gobernar la ruina heredada, sabiendo que fue la degradación de Rajoy la que nos trajo hasta aquí. El infortunio será que de seguir así no habrá siquiera ruina que heredar. Del «Vox ha salvado a Irene Montero» porque Sánchez estaba a puntito de cesarla, tras aprobar los presupuestos, para romper el gobierno de coalición e ir a elecciones y así poder perderlas, llega «la moción de censura fortalece la coalición de gobierno«, no como no derogar las leyes ideológicas de la izquierda durante años con mayorías absolutas, fieles técnicas de luchar contra el socialismo desde las instituciones, o como pedir elecciones anticipadas, de mucha utilidad para convencer a Sánchez en convocarlas; que también les digo que el tener que llegar hasta estos momentos para darse cuenta de la necesidad de solicitarlas al haberse percatado de que “el plan de Sánchez ya no tiene legitimidad”, es de no haber residido en este país en los últimos cuatro años. En definitiva, el PP es a la oposición lo que las feministas son al feminismo, lo que el progresismo es al progreso, lo que los sindicatos son al obrero y lo que el carterista es a la cartera, nada cabe esperar de un partido el cual mientras la izquierda pega un golpe de estado judicial en España, lo condena en dos tweets y pretende recurrir la decisión al tribunal corrompido.