Conversaciones en el andamio: Susto o trato. Por Francisco Gómez Valencia

Ayer hubo dos celebraciones. En una se gritaba “no pasarán” y en la otra “que te vote Txapote” y “Ayuso”. Noche aciaga sin duda y es que, entre ganar para perder y ganar perdiendo solo hay 2,6 kilómetros los cuales se hacen en 7 minutos en coche. Ambas aficiones me recordaron a esos equipos que cuando pierden se deshacen animando como gilipollas. Que lo haga “la tucan” me parece hasta lógico porque se dirige a subnormales… ¿pero los dos en discordia por ser presidente del Gobierno? ¿Uno pretende que Sánchez se abstenga y sea responsable y, el otro pretende que lo apoyen los golpistas a los que acaba de machacar el PSC, o los nacionalistas vascos a los que Bildu ha infringido el sorpasso? No entiendo nada. ¿Y dicen que la política en Italia es complicada?

El PP ha logrado mayoría absoluta en el Senado, lo cual significa poder bloquear las leyes liberticidas de Sánchez obligándole a gobernar vía Real Decreto (fíjate tú lo que le importa), y ha ganado las elecciones al Congreso, lo cual no servirá para nada como le paso a Arenas en Andalucía, por cierto, tampoco debatió. Clara-mente su investidura depende de llegar a acuerdos muy dolorosos con el PNV, acordar algunas minucias con los navarros, nada con Vox para no enturbiar el acuerdo con los vascos y, ceder competencias en Canarias a los canarios sin miramientos.

¿Esto es posible? Tanto como que los nacionalistas catalanes apoyen a quienes los ha debilitado y barrido en su propio pequeño país. Ya no consiste en llevar en la borriquita a Junqueras por las Ramblas al encuentro de Puigdemont (que Sánchez lo haría), sino seguir engañándolos al menos hasta las próximas elecciones en Cataluña para entonces con el apoyo gratis del PP, arrebatarlos la presidencia de la Generalidad como han hecho con el Ayuntamiento de Barcelona. ¿Tan estúpidos serán los golpistas? No lo sabe ni Perry.

De hecho los analistas no hemos acertado ni una, aunque si yo fuera alguno de los dos mencionados, rompería con Sánchez y trataría de recuperar adeptos desarrollando una actitud más que beligerante contra el Estado español, comenzando por bloquear la investidura. ¿Serán capaces o continuarán lamiéndole las botas a Pedro Sánchez? Cualquiera sabe, pues no dejan de ser fanáticos.

El cuanto al PNV, ha perdido la hegemonía con Bildu. Los muchachos han culminado su particular rebelión cultural gracias a la deriva sanchista de Ortuzar y, al blanqueamiento de la ETA llevado a cabo por el PSOE y Podemos estos últimos cuatro años. ¿Apoyarán otra vez a Sánchez o se venderán al mejor postor? En unas hipotéticas negociaciones con el PP si estos dejan claro, que Vox queda fuera de todas las ecuaciones a nivel nacional, quizás tengan algo más que ganar, logrando menos redito a corto plazo para así tratar de recuperar el terreno perdido de cara a las elecciones vascas, ya que, o espabilan o Bildu les arrebata el Gobierno vasco con el visto bueno del PSOE ya que allí juega a dos barajas.

No sé, pinta feo para todos y especialmente para España pues apesta a bloqueo y repetición si los nacionalistas fueran inteligentes. En cuanto al PP-Vox, pues parece que va a ser que no, y lo peor de todo es que para que a Vox le suceda lo mismo que a Ciudadanos, le haría falta al PP, igual otros cuatro años picando piedra.

Recuerdo ahora unas declaraciones de la gran Isabel Ayuso, cuando le decía a Federico la semana pasada que no hay que discutir con Vox, sino respetar los espacios y mantener el contacto solo cuando sea preciso. Así es, aunque esa es otra historia y yo ya estoy muy cansado de repetirlo.

Feliz verano. Seguiremos en la brecha. Esto no se ha acabado aquí…