Queremos una educación pública empoderada. Por Linda Galmor y Guirong Fu

«Queremos una educación pública empoderada para que sea la mejor del mundo y porque una mujer empoderada vale por dos… ¿Empoqué…?»
Siempre que leo EMPODERAR y derivaciones,
una aguda sensación de asco fluye por mi cerebro.
Es cierto que al oírla se me hinchan los cojones;
pero más se me hincha todavía el intelecto:
la palabra, por sí misma, es más fea que unas hemorroides;
aunque más vomitivo se me antoja aún el propio concepto.