
«De los cincuenta animales, diez fallecieron y el resto presentaban muy mal aspecto y desnutrición. Fueron abandonados a su suerte»
Según me comentaba el otro día una persona muy cercana mía, hace treinta años, el profesor que impartía la clase de Producción Animal de la carrera de Ingeniería Agrónoma que se impartía en la Facultad de Ingenierías Agrarias de la Universidad de León, insistía frecuentemente en que los montes españoles estaban abandonados porque no había cabras pastando y ramoneando en ellos.
El abandono de las prácticas tradicionales por una población envejecida junto a la normativa, muchas veces absurda, que regula los aprovechamientos y las relaciones de la cada vez más escasa población rural con el medio en el que vive, han originado la proliferación de matorrales y vegetación herbácea en el entorno de las masas boscosas, ya de por sí sucias y con mucha madera seca, y pastizales de amplias zonas de difícil acceso, propiciando incendios. Es un problema que viene de lejos y que de no cambiar mucho las cosas, tendrá difícil solución.
Hasta no hace mucho tiempo, los bosques proporcionaban leña para chimeneas, cocinas y estufas, así como frutos variados, resinas, y alimento para una notable cabaña ganadera.
En las zonas con pastos de aprovechamiento común, pastaban equinos, bovinos, caprinos y ovinos. Hoy, apenas equinos y bovinos; el ganado menor, en claro retroceso, ha dejado de controlar arbustos y malezas, el monte está sucio.
Los políticos, tras haber sido factores propiciatorios del abandono del medio rural, acaban de descubrir la importancia del ganado menor en el control y limpieza del exceso de vegetación, y llevan algún tiempo hablando de ovejas bomberas y ocurrencias similares.
En algunos lugares han decidido actuaciones con équidos y bóvidos de razas muy concretas para realizar ese control en condiciones de semi libertad. Normalmente con asesoramiento y seguimiento técnicos, pero a veces, con escaso o ningún éxito. La eficacia es cuestionable y discutible.
Hace unos días, se conoció una noticia a este respecto. La Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, de la Generalitat Valenciana, hace dos meses impulsó una iniciativa encaminada a controlar y gestionar la masa forestal del Parque Natural del Desert de Les Palmes, en Castellón, para prevenir incendios mediante la suelta de cincuenta ejemplares de asno.
De los cincuenta animales, diez fallecieron y el resto presentaban muy mal aspecto y desnutrición. Según la Conselleria, el ganadero propietario de los burros solicitó autorización al director del Parque, que a su vez la cursó a la Dirección General del Medio Natural, para introducir a los animales dentro de una parcela privada del parque para que pastasen en los terrenos del mismo y redujese la posibilidad de incendios. De una forma u otra, los animales fueron abandonados a su suerte.

«En España la política inviste de impunidad a los gestores públicos: la máxima responsable de la Conselleria, Mireia Mollá, saldrá indemne»
De momento ha dimitido don Benjamín Pérez, director General de Medio Natural de la Generalitat Valenciana, y se han iniciado investigaciones que se espera aclaren lo sucedido.
Si a cualquier ganadero, servidor incluido, por supuesto, se le muere una quinta parte del ganado de la explotación por negligencia en la alimentación y manejo, el calvario judicial y administrativo sería de órdago, pero como en España la política inviste de impunidad a los gestores públicos, la máxima responsable de la Conselleria, Mireia Mollá, saldrá indemne.
En la actualidad, los burros, en nuestro país, apenas realizan algunos trabajos y se mantienen en su gran mayoría como animales de compañía para solaz y esparcimiento. Lejos quedan los tiempos en que se utilizaban para el transporte y las labores agrícolas de extracción de agua y labranza.
Servidor ha tenido la suerte de conocer a estos animales en las faenas para las que se utilizaban, algo prácticamente desaparecido. Tanto es así, su desaparición como animales de trabajo, que apenas se encuentra referencia a ellos en las publicaciones sobre manejo y producción animal.
Los asnos eran utilizados además de para trabajar por sí mismos, para cruzar con yeguas y obtener mulas, o para cruzar caballos con burras y obtener burdéganos, en ambos casos, animales híbridos que conjugaban las virtudes de las dos especies progenitoras, aunque la mula era más fácil de domar y manejar.
Al ser el mulo un animal híbrido de dos especies diferentes, Equus africanus asinus (burro) y Equus ferus caballus (caballo), es estéril.
Los burros proceden del asno salvaje u Onagro, Equus hemionus, originario de las estepas asiáticas. La alimentación es a base del consumo de una amplia variedad de plantas y hierba. Los burros domésticos reciben además del pasto, forrajes y piensos.
Un animal en libertad puede recorrer grandes distancias diarias para procurarse alimento, pero cuando está acostumbrado a una alimentación cuidada y suministrada por el ser humano, necesita una supervisión y posiblemente, un aporte extra hasta que se haya completado su adaptación.
El burro come hasta cardos si necesita alimento, pero no puede comer cualquier cosa. Todos los animales domésticos necesitan supervisión y cuidados. Los ganaderos y pastores conducen a los rebaños a los lugares más propicios y procuran, además, variación en los alimentos. Los sueños idílicos no suelen terminar bien cuando no hay un cuidador junto a los animales.
Para esto como para cualquier otra cosa, hacen falta conocimientos. Resulta curioso que en los últimos tiempos mucha gente, en concreto los políticos, se arroguen conocimientos sobre muchas materias, ante las miradas atónitas de quienes realmente los tienen y sufren las normas que decretan y promulgan esos entendidos políticos.
También hace unos días, la ilustre ministra para la Transición Ecológica, y vicepresidente tercera, doña Teresa Ribera, en respuesta a unas declaraciones del presidente de Iberdrola, don Ignacio Sánchez Galán, sobre que el Gobierno debería corregir el error de su norma para minorar beneficios a las eléctricas, afirmó que «cada cual hablemos de lo que conozcamos, más que dar lecciones a los demás«.
El señor Sánchez Galán es Presidente y Consejero Delegado de Iberdrola (Iberdrola, ScottishPower, Avangrid, Neoenergia), Ingeniero Industrial, Diplomado en Administración de Empresas y Comercio Exterior por ICADE, Diplomado en Administración General de Empresas y Comercio Exterior. En 2019 Harvard Business Review lo seleccionó entre los cinco mejores CEO del mundo.
Iberdrola obtuvo en 2020 un beneficio de 3.611 millones de euros. Un 4,2% más que en el ejercicio anterior, 2019, habiendo realizado inversiones por 9.246 millones de euros.
La señora Teresa Ribera Rodríguez Vicepresidenta tercera y Ministra para la Transición Ecológica del Gobierno de España, Licenciada en Derecho y diplomada en Derecho Constitucional y Ciencia Política, pertenece al Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado, actualmente en excedencia. Fue profesora del Departamento de Derecho Público y Filosofía de Derecho de la Universidad Autónoma de Madrid.
Pertenece al consejo asesor de Liderazgo Global de la United Nations Sustainable Development Solutions Network (UNSDSN), al consejo asesor global en cambio climático del Foro Económico Mundial, y el de la iniciativa Momentum For Change de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC).
Desconozco los logros personales de la ilustre ministra en los campos de la energía y del Medio Ambiente, aunque al ser nombrada escuché a un naturalista de reputado prestigio afirmar que era la mejor en el asunto medioambiental.
De las veinticuatro horas del día me paso dieciséis en ese Medio Ambiente y mi opinión al respecto no es coincidente con la de ese afamado naturalista. Decía que no conozco los logros personales de doña Teresa, pero conozco los resultados de la gestión del Gobierno del que forma parte:
El Producto Interior Bruto (PIB) en España en 2020 fue de 1.121.948 millones de euros, 122.427 millones de euros menos que en 2019.
En 2020 el déficit público en España alcanzó el 10,95% del PIB, 122.900 millones de euros frente a los 35.763 millones de euros de déficit en 2019.
También conozco que la señora Ribera era Secretaria de Estado de Cambio Climático del Ministerio de Energía en el año 2009 y firmó la Declaración de Impacto Ambiental del Proyecto Castor, almacén subterráneo de gas que provocó 500 terremotos entre los años 2012 y 2013.
El cierre de la instalación supuso una indemnización de 1.700 millones de euros para la concesionaria, Escal UGS, participada mayoritariamente por ACS. Indemnización a pagar por todos los españoles consumidores de gas durante treinta años. Entre los imputados por el caso en cuestión no hubo ningún cargo político, únicamente técnicos .
Estamos gobernados y administrados por personas incapaces y desconocedoras de los principios más elementales de las materias que gestionan. Además, hacen gala de soberbia e indecencia, dos grandes enemigas del buen saber y hacer.