
«Gomorra consiguió con su información precisa, si no acabar con ese veneno social y el mal que ocasiona la mafia, acorralarlo en parte»
La corrupción es tan vieja como lo es la historia de la humanidad. Siempre ha existido, existe y seguirá existiendo la búsqueda de la riqueza y el poder por caminos ilícitos. El miedo, en tantos y tantos casos, lleva a la sumisión y esta es la auténtica perdidición.
«Gomorra» , monumental, valiente y descarnada obra de Roberto Saviano, nos adentra en ese poderoso inframundo que vive en nuestra sociedad: la mafia y su territorio, extendido a numerosos confines como una hidra. Este mal público, de cerrada y ferrea organización, sigue viviendo en nuestros días y alcanza todas las disciplinas que tienen que ver con nuestro devenir.
Roberto Saviano, el autor de la obra y que desde su publicación vive de incógnito temiendo por su vida, lleva el relato a la realidad de la camorra napolitana, como ejemplo paradigmático de que es un espectro que pudre la sociedad donde se inocula y lleva a la muerte y desaparición de gentes.
Más allá de la notoriedad, la leyenda o la atracción, que sobre todo el cine y la televisión han potenciado, este cruel y robusto fenómeno sigue atrapando numeroso espacio y ocasionando desazón. Siempre se ha dicho que todo el mundo tiene un precio y aunque no es excatamente así, se acerca. Esta publicación, además, consiguió con su información precisa, si no acabar con ese veneno social, acorralarlo en parte.