Conversaciones en el andamio: Quien algo quiere algo le cuesta. Por Francisco Gómez Valencia

En la barra del bar al lado nuestro mientras desayunábamos…

– Es que con la que está cayendo todavía hay gente que celebra que regalen dinero a mansalva para esto o aquello, vanagloriándose además -como dijo la de trabajo, que no se sabe ni las estadísticas, o sí; y se las guarda porque es mentira todo lo que dice-, de ser el mejor Gobierno de la democracia, cuando nunca, nunca, han hecho nada para que prospere el personal.

Es que son los que más han robado a la gente necesitada; de hecho, ayer mismo ya entró la primera de ellos por lo de los ERES de Andalucía en la cárcel.

Por si fuera poco, ayer se supo que en el PSOE en Valencia también tiene su caso Gürtel aunque allí se llama Azud, pero como no lo sacan por la tele (porque mandan ellos), pues si te quieres enterar; búscate la vida. Y va Ximo Puig que es el mandamás de allí, y dice que cuando pasó, ellos no estaban.

Y ya de remate, ayer también se supo que el ministro de cultura ha enchufado a dedo a la hija de un alto dirigente del PSC, justo después de que hace unos días el marido de la ministra de economía (que estaba enchufado en Paradores del Estado), al final ha tenido que abandonar el cargo por el clamor popular.

Parece una película… ¿tú te los crees?

– No.

– ¿Por?

– Pues porque quien algo quiere algo le cuesta. Nada es gratis ¿sabes? pero estos están acostumbrados a que otros paguen siempre sus fiestas y quien se los crea, es que vive de ellos con o sin ellos al frente.

– Si, eso mismo creo yo. Deben irse a su casa o nos vamos todos al carajo.

– Desde el momento que hay gente feliz porque regalen dinero a los más pobres en vez de crear las condiciones para que les ofrezcan trabajo para que prosperen por si mismos, tenemos un grave problema como país.

– Bueno; ¿quizás es lo que buscan no?

– Seguramente. Todos más pobres, ellos controlando el cotarro y a cascarla…

– Ya te digo.

– Pero es que, todo está pasando tan deprisa…

– ¡Pues viene otro covid nuevo!

– ¡No jodas!

– ¿Y van a cerrar o controlar los vuelos de China?

– Si hombre, entonces cómo va a entrar…

– ¿Serán capaces?

– ¿Lo dudas?

– Madre mía…