Rodolfo Arévalo 
«Mónica Garcia miente como comunista que es, todos los comunistas mienten, porque la realidad no es nunca la que cuentan o desean»
He visto esta mañana, a través de los ojos de Mónica García, en un programa de Telemadrid, lo mal que está la Sanidad, pero solo la de las regiones y Comunidades en que gobierna el PP. Al parecer en las demás comunidades, todo es un arcoíris multicolor, todo funciona de maravilla y es porque hay funcionarios y doctores “progresistas”, vaya usted a saber qué es eso proviniendo de unas bases de organización de las sociedades paupérrimas del 1917 en Rusia y en otros lugares posteriormente, que en vez de solucionar problemas trajeron mucha más pobreza e incluso hambre.
Debe de ser que todo lo socialista y comunista es mejor, incluso la sanidad para el cacareado pueblo, que incondicionalmente vota por otra parte a Ayuso, como Presidenta de la Comunidad de Madrid y que la votaría aunque se presentara en Social Istón de Abajo.
Y es que hay una realidad que, Mónica García, nunca cuenta a los inocentes que la escuchan y esa realidad es que los medios son limitados. De hecho la economía es la ciencia que estudia, como repartir los bienes escasos, para intentar llegar a todo el mundo y que la sociedad funcione. Por mucho multimillonario que ella crea que hay en España, si dividimos sus fortunas entre cuarenta y siete millones de habitantes, el resultado queda en nada por persona y año, si tenemos en cuenta el gasto que genera la Sanidad pública día tras día.
Además no solo se trata de personal, también de infraestuctura, como el Hospital Zendal, que ella critica y no sé muy bien porqué. Bueno esto último es mentira, si sé por qué, porque es un hospital que funciona y ha funcionado durante los peores momentos de la pandemia de Coronavirus y eso ella bajo un gobierno de derechas lo considera, no solo improbable sino imposible.
También miente como comunista que es, todos los comunistas mienten, porque la realidad no es nunca la que cuentan o desean y por mucho empeño que pongan los votos en España cantan y lo hacen más bien en el sentido de aires de libre mercado y libertad, no de estado intervenido y esclavitud de pensamiento, estudios y vida, en los que no se puede abrir la boca si gente como ella no lo autorizara y cuando desea.
Afortunadamente aquí en España una democracia ejemplar, a los ojos de Europa, salvo en asuntos como la politización que hace la izquierda de la elección del tribunal constitucional y del Consejo del Poder Judicial, ocupa la Jefatura del Estado un muy buen Rey Constitucional Felipe VI y lo seguirá haciendo mal que le pese a la señora García. Al parecer también, no piensa García, porque es falso, pero amaga una y otra vez con los negocios ocultos del hermano de Ayuso, que al parecer no obró de manera lícita con la importación de mascarillas, cuando todos sabemos y ha quedado clarísimo, incluso ante tribunales, que no hubo nada ilegal. Pero siembra, piensa ella, que algo queda.
Es la política del ritornelo maniqueo, insiste sobre un tema hasta que aunque sea falso la gente lo asuma como verdad. Esto que es de primero de comunismo tras lo de disparar un compañero en una manifestación y gritar que la policía está disparando, hay todavía mucho iletrado que se lo cree en España y que detraerá esos votos a otros partidos que sí actúan a favor de su pueblo.
Pero de lo de la sanidad, nada de nada y si gobernasen ellos peor, porque la sanidad privada desaparecería y entonces nos iban a explicar lo bien que les funciona lo público cuando no puedan atender una simple explosión de gripe virulenta. Pues nada rica, siga usted con su cuento de hadas o de que viene el lobo a ver si con suerte en una de esas viene de verdad el lobo y se la como con patatas, todo ello virtualmente claro, que no le deseo ningún mal. Y me alegro de que como miles de otras mujeres en España críe a sus hijos y trabaje, también lo hacen muchos hombres, pero como somos machistas se debe de notar menos.
He visto esta mañana, a través de los ojos de Mónica García, en un programa de Telemadrid, lo mal que está la Sanidad, pero solo la de las regiones y Comunidades en que gobierna el PP. Al parecer en las demás comunidades, todo es un arcoíris multicolor, todo funciona de maravilla y es porque hay funcionarios y doctores “progresistas”, chúpate esa marquesa.
