La cara del infame vale mucho más que el tres por ciento de los millones de desacatos y chulerías que ya ha cometido. Es la gota que desborda un vaso lleno de venenosas traiciones, que por consentidas, y al mojar el tapete, se va a llevar por delante con la fuerza de un tsunami de emociones torcidas, todo lo que se encuentre A SU PASO.
Con la sonrisa le llega la hora de la verdad, que tan ultrajada en la Cataluña oficial deberá preguntarle, al menos, que de dónde sacó el dinero para comprar los silbatos. Porque muchos intuimos que ese rictus satisfecho debe ser el mismo con el que pide en MADRID el dinero de todos para pagar a sus funcionarios y periodistas, sus televisiones y embajadas, las urnas de cartón y los silbatos.
Y quizás ésta de anoche, ante la pitada del Himno Nacional, no sea su última sonrisa satisfecha porque él mismo ha declarado en más de una ocasión, portador sectario de la verdad absoluta, que es astuto, inteligente y audaz, pero a estas horas hasta sus propios espías al servicio del separatismo pero con nómina del estado, le estarán informando que el vaso desbordado se convertirá en un tsunami social.
Reblogueó esto en MarianoDigitaly comentado:
Su fuga alocada hacia ninguna parte pronto llegará a su fin. Y lo sabe
Es un hijo … p…
Y peligroso. Estamos de acuerdo … !!!
Es repugnante, como todos aquellos que, pudiendo, siguen sin hacer nada y dejando que sea cada vez mas chulo y despreciable.