Manuel Artero Rueda 
Lanzo hoy unas preguntas sin respuesta desde este país de las maravillas cuya capital fue antaño la ciudad de los prodigios y ahora está sometido a los dragones que vuelan por Valencia, Aragón y hasta las Baleares. Los que destruyen España por activa o por pasiva, (y cuando hablo de España hablo de las personas que habitan en el territorio, los vecinos) ¿Como pretenden unos o permiten otros que llamemos a nuestro país? ¿La roja? ¿la orgullosa? ¿…?
¿Porque ondean en los ayuntamientos y edificios oficiales la bandera de Palestina, o el trapo estrellado, o la multicolor, o incluso la de una de las repúblicas pasadas?
Se han creado izquierdas, derechas, ¿centro?, ideologías en definitiva que solo existen para vivir de la política, mientras te quitan, nos quitan, el pan de la boca.
Si al ciudadano le dieran trabajo, pudiese conseguir una vivienda, atención digna y justa, ¿Qué narices le importaría una España zocata o diestra? Bueno, ahí dejo estas reflexiones, con una pequña frase de propina: ¡Qué fáciles y dúctiles somos los ciudadanos españoles!
Miguel Bosch
