
El principal argumento intelectual de las miembras y los miembros del comando Rubalcaba de RTVE, ahora podemita, es que tan solo dentro del PSOE existe la profesionalidad, la dignidad y la libertad informativa. Y fuera de ese «progresismo» de izquierdas con que se desayunan por las mañanas tan solo hay pecado, fascismo, censores , «gubernamentalidad» , además de halitosis y mal gusto en el vestir.
Por eso el coro publicitario auspiciado por sus gurús ha publicado en las últimas horas a cinco columnas, y toda página, un auténtico sinfín de titulares y mensajes apocalípticos por las reformas del gobierno, mediante decreto, de la elección de la cúpula de RTVE. Los últimos en reaccionar y sumarse a las protestas han sido los propios profesionales periodistas de su Consejo de Informativos que han manifestado públicamente que se encuentran muy preocupados por el derecho constitucional a la libertad de información, que ellos parece representan.
Qué poderío, qué dignidad, qué amor a la profesión , a la ética del periodismo, y esa libertad informativa que se les olvido cultivar cuando su querido Zapatero derogó el Plan Hidrológico Nacional y no hubo ni tan siquiera un minuto periodístico en sus informativos para analizar el significado de la inversión política en desaladoras. Todo lo contrario: propaganda disfrazada de información.

¿Acaso los periodistas que ahora se rasgan las vestiduras por las decisiones futuras que pueda adoptar el P.P., analizaron periodísticamente, sopesando la balanza informativa, el significado geopolítico de la salida apresurada de las tropas españolas de Iraq? ¿No había periodistas en la casa que tuvieran informaciones acerca de que la crisis campaba en España aunque se negara oficialmente? ¿Ni tan siquiera una pregunta crítica sobre la derogación por decreto ley de la LODE, el presupuesto de la ley de memoria histórica, la alianza de las civilizaciones, o durante ese momento cumbre de la tontería sectaria, cuando todo una señora ministra declaraba que el dinero público no es de nadie, o todo un presidente alardeaba de no saber que significa el concepto de nación?
Pero lo verdaderamente preocupante no es esa autoética de izquierdas que les ha permitido publicitar,sin remordimientos, la alquimia social propugnada desde los gobiernos del contador de nubes y que ahora publicitan los podemitas camino de Vistalegre. Su pecado, creo porque les conozco, es que se han creído sus propias mentiras, se les ha subido a la cabeza los premios que ellos mismos se han dado y como auténticos niños egoístas y mal criados, hijos de papá rico, han obviado los sentimientos, las ideas y las creencias de al menos un cincuenta por ciento de los españoles: todo ese montón de «fachas» abducidos por el capitalismo, empresarios esclavistas dispuestos a acabar con las libertades del proletariado, el estado del bienestar y que no se merecen ni el aire que respiran, porque están equivocados y no piensan como ellos y para mas «inrri» no les gusta el cine subvencionado español. ¿Pero esto no es auténtico fascismo de las ideas, aunque se vistan de vaqueros de marca, eso sí, y bufandita palestina al cuello de los mundos del yupi?
Recuerdo hoy uno de los primero comunicados de ese Comité de informativos tan profesional, escrito justo en esos días para ellos revolucionarios que sucedieron al 11 M. Como en este último que hoy recogen todos los medios informativos, escribieron negro sobre blanco que, ante tanta fechoría del PP la solución pasaba por hablar con el PSOE y, por lo visto en sus emisiones informativas, después de ese flechazo que significó el encuentro, se amaron tanto que durante siete años no les ha hecho falta volver a hablar. Porque como los verdaderos amantes han conseguido convertirse en un solo ser íntegro y feliz, satisfecho de sus orgasmos. Y de esos polvos ¿ A quién le asombran estos lodos?.
Una entrada magnífica. De las que deseas haber escrito 🙂
[…] "CRITEO-300×250", 300, 250); 1 meneos El amor del comando Rubalcaba de RTVE y la dignidad profesional lapaseata.wordpress.com/2012/04/22/el-amor-del-comando-ru… por ite_ite hace […]