
«La sabiduría es un grado, la experiencia añade unos cuántos.., y yo digo que menos no es siempre más.. A veces más.., es más»
Decía don Francisco de Quevedo que “los que de corazón se quieren, sólo con el corazón se hablan”. Lejos de contradecirle, y de parecerme una linda afirmación que usamos mucho, analizo a veces sin querer alguna frase que doy por hecha y con la que me siento identificada…
No me arrepiento, ni me siento culpable de ello, vale más la pena darle a la materia gris un rato, que oír sandeces o leer malas noticias. A veces, incluso podemos llegar a la autocrítica para comprender hasta qué punto podemos o no estar equivocados al reflejarse lo que pensamos en lo que hacemos..
Creo cierto, quizás influenciada por el romanticismo.., que cuando dos personas se aman, los silencios nunca son incómodos, y las miradas interpretan lo que el corazón les sopla.. Pero a la vez creo, quizás por la huella de los años.., que en una pareja que se ama, es muy recomendable la comunicación, el diálogo fluido entre ellos…
No siempre es fácil, y casi siempre recurrimos a las peripecias que nos ha dado el día, pero se aprende, todo se aprende si uno tiene intención de no perder el cariño ni la autoestima. Amar es importante, pero conservar el enamoramiento para que no se instale la rutina, lo enferme la costumbre o algo peor, lo mate la desconfianza y la contradicción…
Hablo de comunicación , de diálogo con mayúsculas y claro, en ambos sentidos… Diálogo a través de las palabras, de los sentidos.., y de los hechos simples de cada día..
«Dos monólogos no hacen un diálogo” aseguró Jeff Daly, por lo que dedicarse, aunque sea unos minutos al día a dialogar con quien amas, lo veo como algo fundamental . ¿Acaso no lo hacemos normalmente con el vecino, con los compañeros de trabajo o con la cajera del supermercado? Y a éstos no tenemos que ganárnoslos.. ¿no? Pues eso…
Que don Francisco llevaba razón, y que durante mucho tiempo he pensado en esa idea romántica que nos dejó sobre el diálogo de los corazones. La sabiduría es un grado, la experiencia añade unos cuántos.., y yo digo que menos no es siempre más.. A veces más.., es más.