
«Esta mañana recuerdo la historia de los dos sobres lacrados que Nikita Kruschev le dejó en mano a Leonid Brezhnev en el 1964 de traspaso de poderes en el Kremiln del todo poderoso entonces Partido Comunista Soviético»
Esta mañana recuerdo la historia de los dos sobres lacrados que Nikita Kruschev le dejó en mano a Leonid Brezhnev en el 1964 de traspaso de poderes en el Kremiln del todo poderoso entonces Partido Comunista Soviético. Es un relato en medio de ese puente que conduce desde la historia real hasta las ensoñaciones de los mitos urbanos.
Kruschev le dijo a Brezhnev : «Camarada, cuando llegues a la primera crisis grave de tu administración y sientas que tu posición está en peligro, abre el primer sobre y lee su contenido. Te dirá cómo superarla. Luego, cuando llegues a la segunda crisis, abre el segundo y sigue con cuidado sus instrucciones».
Algunos años después de dicha reunión, Brezhnev se encontró enfrentado con una profunda crisis política, y abrió el primer sobre. Decía: «cúlpame a mí de todo».
Así hizo Brezhnev y logró sobrevivir la tormenta y mantener su posición, pero muchos años después, llegó una segunda crisis aún peor que la primera. Y el mandatario comunista abrió el segundo sobre que contenía un segundo escueto mensaje: «Camarada, ya es hora de que escribas dos cartas».

«Y es que hoy el socialista Sánchez como consecuencia de su moción de censura tan solo tiene un sobre en la caja fuerte de su despacho en la Moncloa»
Y es que hoy el socialista Sánchez como consecuencia de su resultado electoral tan solo tiene un sobre en la caja fuerte de su despacho en la Moncloa. Igual que Rajoy, al que no le dio tiempo de escribir el segundo en esa rápida mudanza en el poder que se consumó en un fugaz fin de semana. Y por ello el felón debería intuir que tiene muy próxima su primera crisis de gobierno en caso de que consiga formarlo. Es el precio que deberá pagar por su acercamiento a los traidores de España y la respuesta que los españoles le daremos en su cara de niño bonito al que no le importa nada más que residir en la Moncloa, y ni tan siquiera le preocupa ese segundo sobre que según la tradición política documenta la necesidad de preparar el cambio, porque no lo quiere.
Sánchez sabe bien pero lo oculta por ese egoísmo propio de los tahúres que en esencia económica, subvenciones, empresas públicas y mamandurrias, la política del Gabinete de Gobierno del PP heredada junto con los Presupuestos Generales del Estado le permiten vegetar como presidente.
Pero sí es cierto que a Rajoy no se le olvidó escribir el primer sobre «El cúlpame a mi de todo» de la Alta Política ejercida por Kruschez y Brezhnev, y que tan solo se debe emplear una vez, porque sencillamente no tuvo tiempo de lacrar el segundo mensaje, y en honor a esa verdad compuesta por una infinita escala de grises, en esta paseata tórrida de principios de verano, debo recordar el viejo axioma de «España es diferente», porque aquí, desgraciadamente, y un mes después de las elecciones generales, todavía cada día descubrimos nuevos desaguisados. Las trampas y encerronas con que el actual líder socialista construye una muralla de déficit, y sin sobres, que pagamos todos y pagarán nuestros hijos.
Al PSOE le debieron dejar infinitos sobres, pues para todo encuentran la culpa en el franquismo.
Lo siento, le dí algo que hizo saltar el comentario. Y como decía, esos si que a todo desaguisado le aplican los sobres franquistas.
Buena página de la historia, y que Rajoy se la lea pues «morirá» de herencia.
Deducción?
Mis golondrinas se irán con dos polladas y bullicio extra. Tres docenas me levantan poco antes de las siete.
Las más viejas se chotean:
-pintan bastos patrón!
-lo sé, y a vosotras qué más os da?
-nos das pena!
-ah! Ya! no tengo alas para migrar
-pues eso.
Y de estampida salen por su desayuno mosquitero en cuanto empiezan a chillar los segundos pollastres.
Lo sé… a quién le importa esto?
Pues lo mismo que nosotros, a nadie.
Que los bastos sean de porespán ?