
«Me refiero a la Devotio Iberica, algo que Roma admiró desde que conoció esta institución llegando a adoptarla para la guardia pretoriana»
El caballo es el único animal que otorga un título de nobleza a quien lo monta… caballero. Cuando se habla de Caballería y Nobleza se piensa en Centroeuropa pero aquí en la península ibérica tenemos el antecedente más antiguo. Me refiero a la Devotio Iberica, algo que Roma admiró desde que conoció esta institución llegando a adoptarla para la guardia pretoriana.
La Devotio Iberica obligaba al jinete ibérico a seguir a su jefe hasta la muerte en combate sin sobrevivirle. Los romanos veían sobrecogido con admiración como esos jinetes no admitían la derrota y aún aislados y rodeados por el enemigo desmontaban y retaban a duelo singular a todo enemigo que estaba frente a él.
Ese juramento de fidelidad, la devotio ibérica, fue adoptado para la guardia pretoriana imperial y las fuerzas ecuestres ibéricas se convirtieron en fuerzas de choque del imperio.