
«Siguiendo la tendencia de la pintura Art Decó, Tamara de Lempicka pintaba mujeres etéreas, con ropajes flotantes y dedos largos, si bien dan una impresión férrea y escultural»
¡BUENOS DÍAS!
Hoy nos visita la pintora polaca clara representante del movimiento Art Decó, Tamara de Lempicka, con su obra «Señora joven con guantes» (1930), conservada en el Centro Pompidou, de París.
Tamara de Lempicka (1898-1980), nació en Varsovia -como María Gorska- en seno de una familia rica y prominente, su padre era un abogado y su madre, Malvina Decler, una mujer de la sociedad polaca.
María, hija mediana del matrimonio que tenía otros dos hijos, asistió a un internado en Lausana, Suiza, y pasó el invierno de 1911 con su abuela en Italia y la Costa Azul, donde fue iniciada en el conocimiento de los grandes maestros de la pintura italiana. En 1912, sus padres se divorciaron y María fue a vivir con su adinerada tía Stefa en St. Petersburgo, Rusia.
La principal producción de Tamara de Lempicka se centra en retratos femeninos y en desnudos de ambos sexos. Siguiendo la tendencia de la pintura Art Decó, pintaba mujeres etéreas, con ropajes flotantes y dedos largos, si bien dan una impresión férrea y escultural por la pincelada pulida y los marcados contrastes de luces y sombras; son sus mejores ejemplos, junto con los desnudos.
Sus influencias principales son Botticelli, Bronzino, el retrato manierista en general, y el Cubismo, pero sin llegar al arte abstracto. Curiosamente, Tamara empleaba este eclecticismo o fusión de estilos antiguos para representar temas actuales, donde las figuras visten ropajes y peinados de última moda.
Aunque las imágenes más populares de su arte son desnudos, también retrató a su hija en varias ocasiones y a personas relacionadas con la burguesía artística de París y Nueva York.