
«Batet usa la Constitución a beneficio de inventario sin haberla sometido a ninguna revisión por sufragio universal o referéndum»
No sé si es estupidez galopante o mala idea, pero meter a los grupos separatistas en la información que pueda tener el CNI es, con perdón, de gilipollas o de verdaderos hijos de puta enemigos del Estado Español. Premiar con el poder de conocer los secretos del Estado a quienes quieren romper el Estado es eso que digo, una verdadera bobada con mucha mar de fondo.
Podría pasar si el Gobierno lo consintiera por bisoñez o por inocencia, pero no, al parecer la propuesta se hace con toda la mala baba que se pueda tener para seguir contando con los separatistas para mantenerse en el poder aunque sea rompiendo el objeto de gobierno que no es ni más, ni menos, que España. España, según la Constitución en vigor, “se constituye en un Estado social y democrático de derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político. La soberanía nacional reside en el pueblo español” (tomado en su conjunto; añado, del que emanan los poderes del Estado) “y la forma política del Estado Español es la Monarquía Parlamentaria”.
No es ninguna otra, o república o confederación de estaditos, ni federación de mini estaditos, no, no lo es. Sigue diciendo, la Constitución en su artículo dos que: “la Constitución se fundamente en la indisoluble unidad de la nación española, patria común e INDIVISIBLE de todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas”. (No dice otra cosa, como por ejemplo que: ¡los nacionalistas puedan hacer de su capa un sayo!, por mucho que gesticulen y lancen exabruptos por sus bocas).
Por otra parte en el artículo seis de la Carta Magna se dice que: “Los partidos políticos expresan el pluralismo político, concurren a la formación y manifestación de la voluntad popular y son instrumento fundamental para la participación política. Su creación y el ejercicio de su actividad son libres”, y señalo, “¡dentro del respeto a la Constitución y a la ley!” “Su estructura interna y funcionamiento deberán ser democráticos”. Esto último parece no ser así por parte de algunos grupos políticos que de entrada parecen no aceptar el Estado de Derecho que se dieron millones de españoles en el año setenta y ocho y por el que aposté y voté.
Tal parece que algunos hubieran preferido seguir siendo “una, sola, grande y libre”, anterior a este lujo que tienen. Pero como todos sabemos, de borricos anda la piel de toro repleta, y los burros, tanto mentalmente, como políticamente, al parecer no quieren dejarse ganar por nadie. Pero para eso está Batet de presidenta del Congreso, para usar la Constitución a beneficio de inventario sin haberla sometido a ninguna revisión por sufragio universal o referéndum. Batet propone una rebaja de las mayorías que se exigen para acceder a la llamada Comisión de Secretos Oficiales, de manera que grupos independentistas tales como ERC, Junts, y Bildu puedan acceder, bajando el listón a doscientos diez diputados para tener mayoría absoluta, a estos temas reservados que muchas veces a lo largo de estos años les han tenido en el punto de mira por sus acciones díscolas, separatistas y poco fieles a la nación española, que no pueden negar sea su patria.
Pero conviene recordar que la Constitución del setenta y ocho, en su artículo ocho dice: «Las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejercito de Tierra, la Armada y el Ejercito del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su INTEGRIDAD territorial y el ordenamiento constitucional». Además el artículo nueve dice: «Los ciudadanos y los poderes públicos están sujetos a la constitución y al resto del ordenamiento jurídico. Los políticos y parlamentarios, dado que son ciudadanos también«. No dice que, en el Parlamento se puedan hacer propuestas que beneficien a los grupos partidarios de la independencia de sus nacionalidades, a costa de reducir o exponer al CNI al espionaje y control por parte de esos grupos, que es algo así como lo que propone hacer la Presidenta del Congreso.
Muchas veces he afirmado que el Congreso de España parece un gran Hemicirco, en lugar de un Hemiciclo, ahora espero que entiendan ustedes por qué he hecho alguna vez esta afirmación. Esperemos que los secretos de Estado sigan siéndolo por mucho que a la señora Batet y a los independentistas, ya avezados en intentos separatistas, les sigan siendo vedados y se respete la Constitución. No sé si es estupidez galopante o mala idea, pero meter a los grupos separatistas en la información que pueda tener el CNI es de gilipollas o de verdaderos hijos de puta enemigos del Estado Español.