
Aún albergaba esperanza de que esta madrugada entrase la Guardia Civil en los domicilios de los delincuentes Puigdemont, Forcadell y otros/as, para llevarlos al cuartelillo y luego ante el Juez.
De no ser así España ha dejado de ser un estado de derecho y lamentablemente gran parte de culpa la tiene una sola persona, el presidente del gobierno, a quien la sociedad y la historia juzgarà de cobarde, nefasto y mentiroso por no hacer nada, con la colaboración, pasividad e inacción del gobierno, oposición, todo el parlamento y toda la clase política actual y pasada que han ido pasando la patata caliente al siguiente… con el doloroso silencio de la jefatura del estado.
«Se deja de herencia en el fallido «procès» una sociedad rota y dividida que va a incendiar la calle»
Ahí tenemos a Soraya sin vergüenza alguna, la masajista de Junqueras, fracasada, mentirosa sin dimitir y con todos los informativos sin defender a la Nación Española y a la Constitución.
¿Qué pasó ayer? Qué dijo esta mujer: que lo ocurrido «era abochornante y que le producía vergüenza democrática», que sí «patada a los catalanes’ cuando nos la están dando a todos los españoles. A parte de no saber hablar ¿qué va a hacer hoy? … ¿Volver a cobardear en tablas…?
No me vale que se diga que a partir del 1-O no va a haber nada, ya que se deja de herencia en el fallido «procès» una sociedad rota y dividida que va a incendiar la calle. Repito, incendiar la calle y eso solo será el inicio de lo que le viene al resto de España.
…Y si no, al tiempo.