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«Gracias al enchufismo del profesor enchufado por los directivos indepes, otro alumno más capacitado perdió la oportunidad de encontrar un puesto de trabajo»
Vamos a contar otra de esas batallitas que ocurren en Cataluña, y cuyos protagonistas son los iluminados de la secta indepe:
1ª parte. La Generalitat otorga un curso de formación subvencionado para parados, a un centro de la provincia de Tarragona. Esto va por un sistema de puntuación, en función de los recursos del centro y otros cursos anteriores que haya impartido. Hasta ahí todo correcto porque la administración pone unos varemos claros a los que todos acuden en igualdad de oportunidades.
2ª parte. Gestión del centro. Vaya por delante que los dirigentes del centro son abiertamente indepes. Entre varios profesores con el mismo certificado que les acredita para impartir clases, eligen al indepe por afinidad, no por ser el mejor. A la hora de hacer las prácticas del curso, que muchas veces suponen una puerta de entrada al mercado de trabajo, es el profesor quien las asigna, según las capacidades o aptitudes que ve en los alumnos. Las que tenían mejor salida profesional, fueron adjudicadas al alumno que se había significado por ser más indepe, más incluso que él profesor. Alumno que no había obtenido las mejores calificaciones en el curso, ni si quiera en el idioma extranjero que se necesitaba para hacer esas prácticas. Pero ser un buen lameculos era suficiente, ya que era de los suyos. Resultado de las prácticas de ese alumno en la empresa, nada. No se lo quedaron porque no dominaba ese idioma necesario para trabajar.
Gracias al enchufismo del profesor enchufado por los directivos indepes, otro alumno más capacitado perdió la oportunidad de encontrar un puesto de trabajo. Y todo por no ser indepe. Pues esta es la secta de busca borregos que nos dirige en Cataluña, y nos quiere convencer de las bondades de su gobierno, gobierno de los más dóciles, pero no de los más válidos. Asco de proselitismo para inútiles.
Lo cierto, estimado Discover And Share, es que como alicantino que soy y como mallorquín de adopción, sobre el tema de la alienación pancatalanista puedo decir con razones de todos los colores, que desde hace casi 1.000 años los Gobiernos centrales, la falsa “identidad Nacional Catalana” y su pretendida supremacía, no han podido tratarse peor en detrimento del resto de España. Resumiendo, “Peor imposible”. Felicitaciones por tu artículo compañero, y decirte que el hecho de que un “alumno más capacitado perdió la oportunidad de encontrar un puesto de trabajo por no ser indepe”, para los que vivimos en los suburbios de “La Corona de Cataluña” es la regla desde hace más de 35 años, que no la excepción. Si no, que le pregunten a mi ilustre amigo Santiago de Munk.