
«Así es que voy a darte un consejo: si ya ves encendido mi fuego.., mantente a dos metros de mi, ya sabes. El que avisa no es traidor»
Cada día es más difícil agitarse, que se desboque la ira, o que uno pueda recrearse en la duda.., No soy más sabio, ni mejor, sólo más consciente y un poco egoísta.
Ni el mundo me ha hecho así, ni me propongo llevar la contraria.., soy tal cual, sin más. Es mi derecho, el mismo que el tuyo… Y cuando la gota colma el vaso no suele ser la más grande, sólo la última.., punto.
Ocurre que cuando hay «desbordamiento» no suele entenderse, por eso hay que echar siempre la vista atrás.. hacer un «histórico».. Oiga, ¡o no, haga usted lo que quiera de donde mayormente «le salga»!
Reflexionaba Pérez Reverte que era cuestión de tiempo «que los españoles empecemos a exhalar hacia dentro y tendrá que ocurrir.., tarde o temprano». Bien, el momento ha llegado… Nada de expulsar el aire contenido, nada de exhalar.., ¡sólo inspirar!
Así es que voy a darte un consejo: si ya ves encendido mi fuego.., mantente a dos metros de mi, ya sabes «El que avisa no es traidor».
Osea que sólo tú eliges… O te apartas de mi camino.., o te incendias conmigo… Lo de «tragarme» el humo no es una opción.