
«No pagan la tipografía y roban la imagen de las modelos para esta birria; se embolsan 5000 € y los mediadores 80.000€. Pagas tú. Es una maravillosa metáfora de la izquierda sanchista con perspectiva de género: mentiras, robos y basura mediática. C.M. Gorriarán»
Con la idiocia ocurre lo mismo que con la ciencia:
es imposible que agote todas sus ‘posibilidades’;
las ‘políticas de género’, que ahora tanto se llevan,
me obligan a pensar en ello, mal que me pese a raudales:
¡La ‘violencia estética’: nuevo objetivo de Igualdad!
«¡Hay que reivindicar la gordura extrema!»,
sentencia la marquesa de Galapagar,
que, la ‘gordofobia’, de nuestras playas
a todo trance apetece desterrar.
«¡Las mujeres que carecen de ‘cuerpos normativos’ (¡toma ya!)
ven vulnerados sus derechos y lesionada su autoestima!»
¡Ja: en mi experiencia -más de 60 años son-
(aunque, siquiera por salud, lejos estoy de jalear
la mujer oronda… y el gordinflón),
suelen exhibir más cordura y felicidad
que esas flacuchas avinagradas y picajosillas
que parecen bañarse, a todas horas, en su propia bilirrubina!
¡Y qué fácil se lanzan estériles ‘campañas publicitarias’
-que van exprimiendo las ubres resecas de nuestro erario-
desde nuestro pedazo piscina, dictando notas a una secretaria
la mar de mona y delgaducha, para que no desentone con el lujoso mobiliario!
¿Verdad, ‘seña’ marquesa? ¿Verdad, ‘femipijas’ estrafalarias
que andáis mostrando alegremente vuestros gordos tafanarios?
¡La de ‘voluminosos’ y ‘contundentes’ cuadros
que el gran Rubens os habría a todas dedicado!
Posando para él, ¡jamás -oh ebúrneas ninfas-
vuestras humildes y parcas escudillas
sin una buena ‘tajada’ habrían ellas quedado!